Al parecer, los hombres sí tienen el permiso social de asumir que se masturban. Porque socialmente está bien visto que el hombre se toque, claro, porque es hombre ¿Qué más da?.Pero también existe la masturbación en la mujer y están en todo su derecho de asumirlo. Ya quedó atrás el silencio y ver esta práctica como un tabú.
Si la mujer no se toca y explora su propio cuerpo no podrá saber qué cosas le gustan y cuáles no. Que ritmos prefiere y cuáles no, esto siempre desencadena en una mujer anorgàsmica. Presa de sentir placer, por el grave error de no conocerse.
Según un sondeo sobre las prácticas sexuales, realizado en Estados Unidos por la Universidad de Indiana. Sólo el 7,9% de las mujeres de 25 a 29 años se masturba entre dos y tres veces por semana. A diferencia del 23,4% de los hombres que lo hace dentro de la misma franja de edad.
Lauren Streicher, ginecóloga y profesora adjunta en ginecología y obstetricia en la Universidad de Northwestern, explica que esta práctica ayuda a la mejora de la salud en general, ayuda a dormir mejor, disminuye el estrés y permite que te sientas más cómoda con tu cuerpo.
Streicher recuerda que, al igual que el ejercicio físico o un masaje, la masturbación es una forma perfecta para relajarse tanto emocional como físicamente, así que… en lugar de spa costoso para relajarte, ¿porque no una cita con vos misma?.
La masturbación en la mujer: Beneficios
¡Aquí te van tres razones por las que darte auto placer vale la alegría!
- Felicidad: «el placer nos hace sentir bien», explica Streicher, con los orgasmos se liberan endorfinas, dopamina y oxitocina, que naturalmente te ponen de buen ánimo.
- Mejora tu relación de pareja: al explorar tu cuerpo, podes descubrir lo que te da más placer, cuando averiguas lo que más te gusta, podès decirle con seguridad a tu pareja dónde y cómo queres que te toque.
- Más estimulación, más deseo: mientras más te masturbes más ganas tendrás, de acuerdo a eso, cuanto más te masturbes, más cómoda te sentirás con tu sexualidad y más ganas tendrás de hacerlo con tu pareja.
«Se sabe que la masturbación estimula la zona del cerebro que controla la libido», aclara Streicher.
Recuerden, no hay hombre en el mundo que se resista al ver a una mujer tocándose y dándose placer ella misma, no sólo lo vas a llevar a un clímax extremadamente caliente, sino que, mirándote él va a saber cómo, dónde y a qué ritmo te gusta.
